HISTORIAS O MAGIA

3c63c11d0adf90648a94e3e4f85f1f95Nos creemos parecidos cuando, en realidad, somos diferentes. ¿Por qué hubiéramos sido paridos si tuviéramos exactamente lo mismo que aportar que el hijo del vecino?

No, la realidad es que a simple vista nos sentimos como iguales, como calcos, como copias y retratos del pasado; pero no lo somos. Y por eso nos callamos, por eso no nos expresamos, por eso no nos compartimos. Porque nos creemos repetidos, faltos de autenticidad, carentes de distintivos.

Y no es así.

Nos hemos creído una mentira dolorosa que nos hace tapar nuestros jardines de rosas. Hemos caído en la tremenda trampa de pensar que el de al lado puede que sea una super-star pero que nosotros no lo somos. Agachamos la cabeza, dejamos caer los brazos… y nos hundimos en el suelo como un muro pesado; creyéndonos ser ruinas, dejando de lado cualquier opción a compartir lo que somos, a caminar firmes, a abrirnos paso.

Por eso que no te sorprenda cuando quieres abrir la boca pero no salen de ti las palabras, cuando te adelantas para mostrarte pero te repliegas avergonzada, cuando te sorprendes caminando de puntillas, silenciosa, cautelosa, ensimismada…

Y ya basta de este absurdo en el que unos pocos se comen el banquete de saberse valiosos. Y ya basta de esas caritas tristes de seres malcomientes que se autotorturan con mensajes que les dicen ser feos, malos, tontos o indiferentes.

No nos mantengamos impasibles ante el hecho de creernos normales o faltos de carisma y de magia. Desencadenemos una guerra interna con esas imágenes estáticas carentes de vida que tenemos de nosotros mismos y démosle vida carnal a este alma nuestra como Geppetto hizo con Pinocho.

Redescubrámonos día a día, devolvámonos la voz, comencemos danzas que jamás hubiéramos imaginado estar bailando y juguemos a ser aquello que SÍ somos. Pues la vida es un JUEGO tremendamente espontáneo. Y todo lo demás, historias poco interesantes que ya nos hemos contado una y mil veces.