Hoy os escribo a aquellos que me apoyáis. Aquellos que os leéis mis posts, aquellos que venís a mis clases de danza consciente, aquellos que le dais a «me gusta» en algo que publico en facebook… Os escribo a aquellos que escucháis mis paranoias mentales y las transformáis en palabras de confianza, os escribo a los que siempre estáis dispuestos a dar un abrazo, a los que me miráis con ojos de amor, a los que vivís vuestra vida desde la presencia y autenticidad y me invitáis a hacer lo mismo… Hoy escribo a todos mis amigos: los conocidos y los no conocidos, los visibles e invisibles, los continuos y los discontinuos, los físicamente presentes y los virtualmente activos… Escribo a todas esas personas que en algún momento han susurrado palabras motivadoras en mis oídos, que han rozado mi cuerpo disimuladamente para indicarme el camino que se abría ante mí o que ni siquiera han necesitado mirarme fijamente a los ojos para saber que yo sola sabía lo que estaba haciendo.
A todos vosotros, GRACIAS, porque soy muy consciente que, sin personas como vosotras, no podría estar haciendo lo que me gusta hacer ya que, una de las cosas que adoro, es COMPARTIR mi camino con todos vosotros.
Gracias por estar ahí, de manera completamente PRESENTE mientras camináis vuestros propios caminos. Gracias por reflejarme mi grandeza y mi pureza, gracias por ser un espejo tan limpio en el que poder conocer mi propia verdad.
¡GRACIAS!